Obligados a sobrevivir, Cristina y Mauricio Macri se ven en la necesidad a volver a participar. En frente, Javier Milei los espera teniendo un pacto con la primera y ganas de confluir con el otro.
12:30 | Martes 14 de Enero de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
Cristina Fernández de Kirchner comparte muchas más cosas con Javier Milei que las que el mundo político supone. No sólo pasa por el interés que tiene por nombrar a Ariel Lijo como ministro de la Suprema Corte de Justicia sino que, además, le fascina el desparpajo y la audacia presidencial a la hora de tomar una medida o decisión política.
Sin embargo, lo que más quiere que haga Milei es algo que sí están dispuestos a hacer la hermana Karina y Santiago Caputo: erradicar del mapa político a Mauricio Macri, hoy obligado a defender su terruño personal, la Ciudad de Buenos Aires, ante la avanzada en todos los frentes realizados desde el más alto poder de La Libertad Avanza.
Otra vez los expresidentes coincidirán en un proceso electoral pero en distintos lugares. En 2019 ella fue candidata a vice y él a presidente. Ganó la fórmula que Cristina eligió componer con Alberto Fernández. Ahora, en 2025, la lógica indica que la expresidenta será candidata a diputada nacional en la provincia de Buenos Aires mientras que "el presi" lo será en la Ciudad Autónoma. Más allá de la amenaza de su primo Jorge, quien lo lanzó para cualquiera de los dos lados de la General Paz, todos saben que hay una brutal diferencia entre un lugar y el otro para las pretensiones macristas y las encuestas de opinión.
La idea de que haya apellidos tan potentes y con posibilidades importantes de triunfo desdibujaría al hoy apabullante oficialismo mileísta. Por eso en muchos laboratorios empiezan a colocar, tal cual lo anticipó MDZ, a "El Jefe" como candidato en la provincia de Buenos Aires, así la discusión es por el peso del apellido y no de las fuerzas que representan.
El proyecto oficialista tiene consigo una dualidad difícil de resolver. Por un lado es el que mejor parece captar el humor social y a pesar del feroz ajuste, con una actividad que no repunta, ganó en el tema de la paciencia y la esperanza. Pero, para completar una lista, La Libertad Avanza parece estar obligada a poner como referentes a dirigentes que no estuvieron en la primera hora y se suman para sobrevivir o porque si bien creen en el rumbo, esperan ser los beneficiarios de lo que vienen.