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Funcionarios reconocen su inquietud debido a la decisión del presidente de mantener el congelamiento de sus sueldos por tiempo indefinido. Aumenta el enojo de los empleados en Casa Rosada.
Domingo 23 de Marzo de 2025
10:47 | Domingo 23 de Marzo de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
Pasan los meses y los sueldos de los funcionarios del Gobierno siguen congelados por tiempo indefinido. Luego de aquel polémico aumento dispuesto en marzo de 2024 y su marcha atrás a los pocos días, el presidente Javier Milei decidió no incrementar los honorarios de los miembros del Gabinete nacional "hasta nuevo aviso".
Pese a la inflación del 110% desde el inicio de la gestión libertaria, el jefe de Estado insta a “dar el ejemplo”, "respetar el déficit cero" y “no piensa en subir los salarios de los funcionarios”.
“Se la van a tener que aguantar, Javier no piensa aumentarles el sueldo”, enfatizó a MDZ una alta fuente oficial. La bajada de línea se mantiene inalterable en las distintas áreas que están por fuera de la administración central. El primer eyectado fue el secretario de Trabajo, Omar Yasin, a quien se lo marcó por impulsar el Decreto 206/2024 que autorizaba una suba de casi el 50% de lo sueldos del Gabinete. Llamativamente había sido firmado por el presidente, su exjefe de Gabinete, Nicolás Posse, y la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello.
Otro despido ocurrió en diciembre con la extitular de la AFIP, Florencia Misrahi. Si bien su salida se detonó por la su idea de aplicar impuestos a influencers y youtubers, en Casa Rosada cayó mal el nivel de los sueldos de los empleados jerárquicos. Desde la oficina del presidente filtraron que Misrahi cobraba $35 millones mensuales, cuando Milei cobra $4 millones. A su vez, habían anunciado un recorte de los sueldos, que significaría un ahorro de 121.000 millones de pesos correspondientes a sueldos de funcionarios durante 2025.
Esta negativa de Milei produce malestar dentro de los integrantes del Gabinete, quienes expresan su inquietud en los pasillos de Balcarce 50. “Seguimos esperando, pero no tenemos novedades. Se nos está complicando poder pagar las cosas en casa”, expresó un importante funcionario de la gestión. Hay casos de miembros del Gobierno que expresan dificultades para poder pagar el colegio de sus hijos o la cuota de la medicina prepaga de su familia. “Estaría bueno que se acuerde de nosotros el presidente”, comentó otra fuente de renombre, con un alto cargo político.
El salario de Milei es de $4.066.018 (todos los valores en bruto), mientras que Victoria Villarruel percibe $3.764.820 y cada uno de los ministros que integran el Gabinete cobra $3.584.006.
Por su parte, los secretarios de la Nación, sus sueldos alcanzan los $3.282.709,47 mensuales, y los subsecretarios $2.981.513,49 mensuales. A la fecha, los senadores nacionales ganan $ 7.867.171 y les quedan en el bolsillo $ 5.431.297 y existe la posibilidad que se aumenten asimismo los sueldos en las próximas semanas.
En tanto, el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, utilizó la paritaria de los empleados parlamentarios para autorizar una suba del 6,13% en los sueldos de los legisladores, que ahora cobran $ 3.956.129,16.
En Casa de Gobierno hay empleados que aseguran cobrar $600.000 e indican que no tienen expectativa de un aumento que les cambie su presente económico. Por esa razón, es normal que haya personal que tenga dos trabajos o hasta deba comerciar productos caseros dentro del Gobierno para subsistir. Además, denuncian que el Gobierno está contratando personal “facturando y por menos plata aún”. “Están buscando gente que les facturen y les dicen que no les van a aumentar el sueldo hasta el 2027. Están jugando con la desesperación de mucha gente que termina aceptando”, expresó a MDZ un empleado que se desenvuelve en una de las áreas donde se reportan estas altas de personal.
“Es necesario que se conozca nuestra situación, no sabemos cuánto tiempo vamos a resistir sin tomar alguna medida”, señaló otro estatal, que cobra un millón de pesos al mes.
En febrero, el sindicato UPCN acordó una recomposición salarial para los empleados públicos nacionales del 1,5 por ciento para enero y 1,2 por ciento para febrero, siguiendo con la imposición del Gobierno de mantener los aumentos por debajo de la cifra de inflación mensual.
En contrapartida, el titular de ATE, Rodolfo Aguiar, rechazó el acuerdo: "Se trata de una paritaria que no solo no mejora sino que profundiza la crisis de ingresos de los trabajadores del sector público".
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