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Seguidores de Evo Morales emboscaron un policía con dinamita durante bloqueos en Bolivia

El gobierno boliviano denunció que militantes cocaleros secuestraron a un agente, le colocaron explosivos en el cuerpo y lo hicieron detonar. Los incidentes dejaron cinco civiles fallecidos.

Viernes 13 de Junio de 2025

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13:43 | Viernes 13 de Junio de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma

El 12 de junio, en medio de bloqueos de rutas organizados por seguidores de Evo Morales para exigir su habilitación electoral, el viceministro de Régimen Interior, Jhonny Aguilera, informó que un policía identificado como Christian Calle fue secuestrado por una “horda” de manifestantes en Llallagua, Potosí, y asesinado al colocarle un artefacto explosivo adosado al cuerpo, el cual detonó dentro de su cavidad estomacal.

Este hecho se suma a los violentos enfrentamientos que dejaron un saldo de cinco víctimas fatales: cuatro policías y un campesino, producto de disparos, explosiones y agresiones en las regiones de Potosí y Cochabamba.

Las protestas, ya extendidas por 11 días, fueron promovidas por el expresidente Morales tras ser inhabilitado para presentarse en las elecciones previstas para el 17 de agosto, lo que generó profundos cortes de carreteras y múltiples enfrentamientos con las fuerzas del orden.

El gobierno boliviano denunció que los bloqueos fueron acompañados de grupos armados organizados, algunos probables paramilitares, lo que agravó la violencia. Según el Ejecutivo, Morales estaría buscando alterar el curso electoral y presionar por su regreso, aunque ha sido excluido por fallos judiciales que impiden su candidatura.

La situación motivó el despliegue de policías y tropas militares para desbloquear las rutas, registrar localidades como Llallagua y se está desarrollando una investigación oficial para identificar a los responsables de los hechos. Paralelamente, la Fiscalía anunció que castigará penalmente a quienes hayan participado en estos actos violentos.

Esta tragedia, única en su gravedad por el uso de explosivos contra miembros de la fuerza pública, subraya la alta peligrosidad del conflicto y sitúa a Bolivia en una situación de extrema tensión política y social, con un panorama electoral empañado por la violencia.

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