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Kicillof en la encrucijada: ¿desdoblar las elecciones provinciales o alinearse con Cristina Kirchner?

El gobernador de la provincia de Buenos Aires enfrenta una compleja decisión electoral en medio de la interna del PJ. La posible separación de las elecciones provinciales y nacionales podría marcar un quiebre con la estrategia de Cristina Kirchner.

Sábado 28 de Diciembre de 2024

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08:57 | Sábado 28 de Diciembre de 2024 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma

El gobernador Axel Kicillof se encuentra en una encrucijada política crucial de cara a las elecciones de 2025. La pregunta que ronda su agenda es: ¿desdoblar las elecciones provinciales de las nacionales o seguir la estrategia del kirchnerismo? Esta duda, que se asemeja a la famosa cuestión planteada en "Hamlet" de Shakespeare, tiene en vilo tanto al peronismo bonaerense como al nacional.

La provincia de Buenos Aires es el epicentro donde se libra la lucha por el liderazgo dentro del peronismo, y en este cuadrilátero se encuentran Kicillof y Cristina Kirchner, quienes históricamente fueron aliados, pero hoy enfrentan un conflicto interno insólito. A pesar de que Kicillof ascendió al primer plano político gracias al apoyo de la ex presidenta, la relación entre ambos se ha enfriado, y la situación actual podría marcar un quiebre definitivo.

Kicillof llegó a la política gracias al respaldo de Cristina Kirchner, quien lo promovió desde su rol en Aerolíneas Argentinas hasta su posición como ministro de Economía y, posteriormente, gobernador. Sin embargo, a medida que consolidó su poder en la provincia más importante del país, Kicillof empezó a visibilizar sus ambiciones y diferencias con la ex presidenta, quien ha mantenido una postura dominante dentro del peronismo, especialmente en lo que respecta a la sucesión de liderazgo.

La disputa se intensifica ahora en torno a la estrategia electoral. Kicillof está considerando adelantar las elecciones provinciales, desdoblándolas de las nacionales. Esta jugada busca evitar la “tracción negativa” que podría generar una posible derrota nacional, especialmente frente a la fuerza de Javier Milei. Para muchos de sus aliados, un desdoblamiento de los comicios permitiría que la gestión de Kicillof, que goza de altos niveles de imagen positiva, se plebiscite sin el peso de una elección presidencial adversa.

Sin embargo, la propuesta de desdoblar las elecciones genera fuertes resistencias dentro del kirchnerismo. Cristina Kirchner y su círculo, incluido Sergio Massa, se oponen a esta estrategia. Para ellos, separar los comicios provinciales de los nacionales sería un error, ya que debilitaría la unidad del proyecto peronista y podría dificultar la conformación de las listas, que históricamente han sido centralizadas en su figura. En este escenario, Kicillof se enfrentaría a la dificultad de negociar con un Kirchnerismo menos dispuesto a ceder.

A pesar de las tensiones, Kicillof no ha tomado una decisión definitiva. El gobernador debe evaluar si está dispuesto a llevar la confrontación a un nivel superior en un escenario electoral incierto, en el que el ascenso de La Libertad Avanza representa una amenaza creciente para el peronismo. Además, la discusión sobre la eliminación de las PASO también jugará un rol clave en la estrategia final, ya que si el Gobierno nacional no logra su cometido de eliminarlas, la opción de desdoblar las elecciones perdería fuerza.

En este contexto, el futuro de la provincia de Buenos Aires y del peronismo nacional parece depender de la decisión que Kicillof tome en los próximos meses. La interna del PJ bonaerense podría cambiar por completo el mapa político del país.

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