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Messi, la máquina de ganar que revoluciona a la ciudad del fútbol

Desde el momento en que pisó Manchester, Lionel Messi se transformó en ciudadano ilustre de esta ciudad que a fuerza de un tal Kun y un tal Pep se va pintando de celeste (City) y destiñendo de rojo ("maniu" como le dicen aquí al United).

Martes 20 de Marzo de 2018

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17:51 | Martes 20 de Marzo de 2018 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma

Es así en todos lados, y más si un cartel del Etihad Campus anuncia City Football. Si es la ciudad del fútbol, Messi es ciudadano ilustre.

Su presencia ilumina y genera expectativas que suele cumplir. Hay más fotógrafos y camarógrafos que en las prácticas anteriores y hasta muchos empleados que trabajan en el impresionante predio del City bajan sólo para verlo de cerca. Y él, Leo, con gorro negro estilo pitufo, ilusiona con su sola presencia.


Y hoy más que nunca se trata de la máquina de sumar. Partidos, goles, récords, ilusiones... En lo que va de la temporada, Messi lleva 43 partidos con el Barcelona (es el que más jugó de este plantel, con 3.663 minutos), con nueve más por jugar por Liga (entre ellos el clásico ante Real Madrid, el domingo 6 de mayo) y una final de Copa del Rey (el 21 de abril ante Sevilla) y cinco posibles por Champions League si llega a la final del sábado 26 de mayo en Kiev.

Con la Selección tiene cinco encuentros acumulados en la mochila, a los que sumará estos dos de la gira (Italia y España) y alguno más que anda dando vueltas en la agenda. Podría superar cómodamente los 60 partidos. Nadie juega más.

En el rubro goles, la cuenta es sencilla: en 2018 lleva 16 en 18 partidos. Nadie grita más. Pero Messi, la máquina de jugar, siempre juega por algo y ese algo este año es nada menos que mucha más gloria: la Liga, la Copa del Rey, la Champions, el Mundial...

"Poder levantar la Copa es un sueño de siempre y cada vez que llega un Mundial se hace más fuerte todavía, por eso también el llanto del 2014, sabemos la dificultad que tiene ganar un Mundial y quedarnos tan cerquita fue doloroso. Un Mundial es muy difícil y nosotros estuvimos a tan poquito de cumplir ese sueño que fue duro", le dijo Leo a Luis Majul en una nota reciente.

Pero la Champions también entra en el terreno de las obsesiones: con el Barsa conquisto "sólo" una de las últimas seis ediciones, mientras que Cristiano Ronaldo levantó tres de las pasadas cuatro con el Real Madrid.

El 24 de junio, en Rusia, entre el partido con Croacia (jueves 21) y el de Nigeria (martes 26), ambos de la primera ronda, Leo repetirá el rito de cada Copa del Mundo: cumplir años (31 esta vez) metido en esa atmósfera mundialista.

En Alemania 2006 festejó sus 19 años el mismo sábado que Argentina le ganó 2-1 a México por octavos de final (aquel golazo de Maxi Rodríguez). Leo entró a los 84 minutos por Javier Saviola y jugó también el suplementario.

En Sudáfrica 2010, sopló 23 velitas entre los choques con Grecia por el grupo y ante México por octavos. Y en 2014 cumplió 27 convirtiendo dos goles ante Nigeria, también en primera ronda.

Messi llegará a Rusia cargado. De partidos y de presión, más que ninguno. En la Selección preocupa el tema pero saben que poco pueden hacer. Al fin y al cabo quien le paga cerca de 40 millones de euros por año es el Barcelona, y nadie le puede exigir que lo guarde con tanto en disputa. Además, Leo quiere jugar siempre. En España hablan del Messi actual como "un jugador total". Lo escribió el diario El País unos días atrás. "Es el amo y señor de un equipo en el que todos juegan para él".

Leo corre bajo el frío de esta Manchester celeste. Interpreta como nadie esa frase que Sampaoli puso en su reciente Twitter: "La pelota siempre es el argumento".

La pelota y él. Juntos para que Leo siga siendo esa máquina de sumar, ganar, gritar e ilusionar.

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