Conmoción: una novia embarazada murió de un derrame cerebral antes de entrar a la iglesia

23:25 | Miércoles 18 de Septiembre de 2019 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma

La noche de bodas de una pareja brasilera terminó en tragedia cuando la novia, que cursaba la semana número 29 de embarazo, sufrió un derrame cerebral en la puerta de la iglesia. A pesar de los desesperados intentos de su futuro esposo por conseguir ayuda, la mujer fue declarada con muerte cerebral y falleció a las pocas horas. Sin embargo, los doctores lograron salvar la vida de su hija, que nació por cesárea.

El hecho ocurrió el sábado en San Pablo, cuando Jessica Guedes, de 30 años, llegó a bordo de una un auto a la iglesia donde iba casarse con su novio, Flavio Gonçalves da Costa, teniente del 46º Batallón de la Policía Militar. Fue entonces cuando, antes de que pudiera bajar del vehículo, comenzó a sentir un fuerte dolor cervical.

Al notar su demora, su prometido, que la esperaba en el lugar desde más temprano, decidió ir hasta el coche para asegurarse de que todo estuviera bien. "Ví que no bajaba y me acerqué. Una prima suya me dijo que Jessica no se sentía bien. Abrí la puerta y ví que estaba acostada a lo largo del asiento. Había sufrido un desmayo", contó en diálogo con la Revista Crescer.

“Jessica empezó a hablar conmigo. Le dije: 'bebé, estoy aquí'. Ella me dijo que todo estaba bien, pero que tenía un fuerte dolor en la nuca", relató el hombre de 31 años.

De inmediato y con la sospecha de que se trataba de un cuadro serio, pidió ayuda a sus amigos del cuerpo de bomberos, que le enviaron una unidad en la que trasladaron a su novia hasta un hospital cercano. Sin embargo, los médicos de ese establecimiento no pudieron atenderla, ya que no contaban con el equipamiento adecuado.

Desesperado, Flavio intentó llevarla hasta un segundo centro asistencial, pero, para cuando llegaron, Jessica fue declarada con muerte cerebral.

Al ver que la mujer estaba embarazada, los médicos le realizaron una cesárea de urgencia y lograron salvar la vida de su hija, Sophia, que nació con un peso de 930 gramos y midió 34 centímetros.

“Jessica siempre había dicho que si en algún momento le pasaba algo, quería donar sus órganos, y así lo hicimos. Estoy con mi hija todo el tiempo, acariciándola y pidiéndole a Dios lo mejor. Me aferro a amigos y familiares, que me han estado dando fuerzas y consejos en este momento difícil”, expresó Flavio.

No obstante y en medio del dolor, el hombre tuvo que hacer frente a un nuevo problema: costear los gastos de la operación, la hospitalización de la bebé -que nació prematura- y los costos del entierro de su novia. "Después de un matrimonio costoso, nos encontramos sin esos recursos financieros”, aseguró.

Por estos motivos, inició una colecta a través de Internet con el objetivo de de recaudar los U$S25000 que necesitaba. Increíblemente, para el mediodía del miércoles llevaba recaudados U$S47000.

“Ahora soy padre y madre. Me aferro a Dios, a la palabra y a mis amigos. No es fácil. Miro videos de Jessica para recordarla. Era una persona realmente iluminada. Fuerte, guerrera. Era un ser de luz", manifestó Flavio, que expresó su agradecimiento a todos los que se solidarizaron con su causa. 

Fuente: TN