Martín Guzmán alertó por el impacto que podría sufrir el mercado cambiario por la inyección de liquidez

12:13 | Miércoles 25 de Noviembre de 2020 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma

El ministro de Economía, Martín Guzmán, consideró esta mañana que los Estados nacionales cumplirán un «rol muy fuerte» y los Bancos Centrales serán «protagonistas» en el proceso de reactivación pospandemia. Sin embargo, advirtió que en primer término Argentina deberá bregar para que la inyección de liquidez no vaya a presionar el mercado cambiario.

Según informó NA, el titular del Palacio de Hacienda aseguró que «los Estados van a jugar un rol muy fuerte en la recuperación económica y los Bancos Centrales tendrán un protagonismo para la generación y expansión de liquidez». Del mismo modo, sostuvo que estos últimos deberán buscar herramientas para que, al mismo tiempo que se implementan las políticas expansivas, tengan el mayor multiplicador macroeconómico posible, tratando de que la inyección de liquidez que se le da a la economía tenga varias vueltas de impacto sobre la demanda agregada.

Asimismo, Guzmán dijo que esto genera «desafíos» para las economías dado que esa liquidez expandida eventualmente llega a activos financieros. No obstante, sostuvo que en países como la Argentina «hay que tener mucho cuidado sobre a qué tipo de activos va, sobre todo a la demanda de moneda extranjera». «En economías más avanzadas lo que va a ocurrir y de hecho ocurrió en 2020, es que esa inyección fuerte de liquidez en la economía empieza a poner presión sobre los precios de los activos financieros con consecuencias distributivas que son regresivas», explicó

Durante su exposición en el cierre de las Jornadas Monetarias y Bancarias 2020, el ministro Guzmán aseveró que en economías como la de Argentina, en las que aún no se ha construido una «suficiente robustez de la moneda» y la expansión de la liquidez se canaliza a través de la demanda de moneda extranjera, hay un «desafío» para restablecer «todas las funciones del dinero». En este sentido, señaló que el Gobierno ve «valor» en la soberanía monetaria entendida como un «razonamiento macroeconómico» y no como un «argumento sentimental».

«El hecho es poder tener una moneda que se vuelva una referencia y que permita contar con instrumentos de ahorro y financiamiento. Y que de esa manera podamos ir en la dirección de resolver los problemas estructurales de la Argentina con este patrón de bimonetarismo, que contribuye a la mayor inestabilidad macroeconómica y en la balanza de pagos», concluyó.