El máximo tribunal rechazó el pedido de Lijo y lo obliga a renunciar como juez federal para asumir en la Corte, algo que en principio no haría y esperaría la aprobación del Senado.
17:40 | Jueves 06 de Marzo de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
La Corte Suprema rechazó la licencia extraordinaria que pidió Ariel Lijo y ahora deberá renunciar como juez federal para poder asumir en el máximo tribunal, algo que en principio no haría y esperaría la aprobación en el Senado.
La novedad de la decisión de la Corte es que el flamante cortesano Manuel García Mansilla votó en contra de los intereses de la Casa Rosada, cumpliendo con el Pacto de Talcahuano que anticipó LPO.
Este medio había adelantado que en los tribunales se hablaba de la posibilidad que la asunción de exprés de Mansilla fuera una jugada de Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz para aislar a Ricardo Lorenzetti y sostener la mayoría que tenían con Juan Carlos Maqueda.
Pero la duda era si García Mansilla se animaría a votar en contra del gobierno de Javier Milei apenas una semana después de su asunción. El escenario que parecía más probable era que se excuse en la votación sobre Lijo, pero el académico mostró los dientes y rápidamente se desmarcó de la Casa Rosada.
El Pacto de Talcahuano para complicar el arribo de Lijo a la Corte Suprema
El voto de García Mansilla contra Lijo es un golpe para Santiago Caputo, el ideólogo de su llegada a la Corte como el propio juez admitió durante la audiencia en el Senado (ver video). El asesor había intentado mostrar su influencia mandando a su mano derecha Sebastián Amerio a la asunción, pero la realidad lo golpeó rápido. Los últimos traspiés de Caputo ya son motivo de burla en las redes, donde ahora lo apodaron "El Gago del Kremlin" en referencia al errático entrenador de Boca Juniors.
Otro derrotado con esta votación es Lorenzetti, que volvió a votar en soledad como desde hace tiempo. El rafaelino es el principal promotor de la llegada de Lijo a la Corte y había convencido a los operadores del gobierno que podría formar una nueva mayoría junto a García Mansilla.
Pero Rosatti parece haberse movido más rápido y aprovechó que García Mansilla no llegó a la Corte sin padrinazgo político claro. Como contó LPO, el académico además se movió muy rápido y la semana pasada se puso a disposición del presidente de la Corte y de Rosenkrantz.
Según lo que trascendió desde su entorno, Lijo no piensa renunciar a su juzgado y esperará que el Senado apruebe su pliego.