El comunicador destacó la labor pastoral de Robert Prevost durante su paso por la diócesis de Chiclayo. Subrayó su cercanía con los jóvenes, su compromiso con los más vulnerables y su conexión con símbolos de la fe popular en la región.
19:04 | Jueves 08 de Mayo de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
Ruperto Arroyo, periodista radicado en la ciudad de Chiclayo, dialogó con Fenix desde Perú y repasó el legado de quien fuera obispo de esa diócesis: el hoy Papa León XIV, Robert Prevost. Relató que su vínculo con la comunidad comenzó en 2014, cuando asumió como obispo local, y se fortaleció durante casi una década de cercanía con los fieles. “Recorrió distritos alejados, acompañó a la juventud y organizó celebraciones clave como el Corpus Christi”, recordó.
El periodista señaló que el nuevo Papa fue gran canciller de la Universidad Católica Santo Toribio de Mogrovejo y que durante su gestión trasladó imágenes religiosas como la Cruz de Chalpón y el Divino Niño del Milagro para que fueran bendecidas por el Papa Francisco. Además, lo definió como una figura frontal, carismática y comprometida con la realidad social del país. “Durante momentos de crisis política y corrupción en Perú, siempre llamó al diálogo y a cuidar a los más desfavorecidos”, remarcó.
Arroyo compartió también la esperanza de los chiclayanos de que el nuevo pontífice cumpla un anhelo pendiente: declarar a la localidad de Eten como ciudad eucarística del Perú. Si bien aclaró que desde 2023, cuando asumió funciones en el Vaticano, Robert Prevost no regresó a Chiclayo, confió en que eventualmente podría hacerlo como parte de su agenda papal. “Para nosotros, aunque haya nacido en Chicago, es un pastor peruano de corazón”, concluyó.