Dijo que será candidato si se lo pide el exmandatario, que debe declarar esta semana en el juicio por golpismo.
09:24 | Sábado 07 de Junio de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
Eduardo Bolsonaro quiere ser el próximo presidente de Brasil.
El tercer hijo del exmandatario Jair Bolsonaro se perfila como el sucesor político de su padre, inhabilitado hasta 2030 y bajo proceso por golpismo, a 16 meses de las elecciones presidenciales del 4 de octubre de 2026.
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Desde su exilio voluntario en Estados Unidos, el actual diputado con licencia, de 40 años, se mostró dispuesto a asumir el desafío: “Si fuera una misión dada por mi padre, voy a cumplir”, dijo en una entrevista con la revista Veja.
Fue toda una declaración de principios. Desde la derecha brasileña, pocos dudan de que su padre lo elegirá como su estandarte en caso de que no logre revertir la inhabilitación política por encima de sus otros hijos, el senador federal Flavio y el concejal carioca Carlos, y de su propia esposa, Michelle Bolsonaro.
El camino al Palacio del Planalto no será fácil. Tendrá un gran obstáculo interno en la creciente figura del popular gobernador de San Pablo, Tarcicio de Freitas, exministro de Infraestructura durante el gobierno bolsonarista. Pero el respaldo de su padre podría inclinar la balanza sin derecho a réplica.
“El candidato más competitivo será aquel que tenga el apoyo de Bolsonaro”, resumió a TN el académico Alberto Almeida, analista del Instituto Brasilis y autor del libro “El voto del brasileño”.
Qué posibilidades tiene Eduardo Bolsonaro de ser candidato a presidente
Si bien falta un año y cuatro meses para las elecciones, el bolsonarismo se prepara para el peor de los escenarios.
Su líder no solo está inhabilitado políticamente hasta 2030 por diseminar sospechas infundadas sobre el sistema electoral en plena campaña electoral de 2022. También tiene problemas de salud y enfrenta un juicio por golpismo, en el que deberá declarar como imputado en la semana del 9 al 13 de este mes.
Jair Bolsonaro está acusado, junto a otros seis antiguos colaboradores, de encabezar una conspiración para mantenerse en el poder tras ser derrotado por el actual presidente, Luiz Lula da Silva, en las últimas elecciones. Se expone a una condena de hasta 40 años de cárcel.
Eduardo y Jair Bolsonaro (Foto de archivo: AFP)
Eduardo y Jair Bolsonaro (Foto de archivo: AFP)
En ese difícil panorama, su hijo Eduardo está dispuesto a convertirse en su heredero.
“No me presento aquí como candidato a uno u otro cargo”, sino “como alguien dispuesto a ayudar al país, a reencontrarse, a levantar la cabeza y a creer en sí mismo”, dijo en un video publicado en sus redes sociales.
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En su mensaje, intentó moderar su habitual discurso de confrontación y se mostró conciliador. Así, reconoció “virtudes” de figuras cuestionadas por la extrema derecha brasileña, como el expresidente socialista João Goulart, cuyo derrocamiento en 1964 dio comienzo a una dictadura de 21 años respaldada por su padre.
“Negar las virtudes de cualquier período de la historia es negarnos a nosotros mismos. No habrá unión nacional si cada uno de los lados quiere borrar al otro. Brasil precisa reconciliación y no resentimiento”, ahondó.
El analista político Antonio Lavareda, presidente honorario de la Asociación Brasileña de Investigadores Electorales, dijo a TN que el apellido Bolsonaro le “asegura una gran tajada de votos”.
“La prensa tomó como un test” su anunciada disposición a postularse como candidato presidencial, indicó.
Una encuesta del Instituto de Investigaciones Sociales, Políticas y Económicas (Ipespe, por su sigla en portugués), a la que tuvo acceso TN, mostró que Eduardo Bolsonaro se ubica en el cuarto lugar “entre los dirigentes que podrían ser un buen presidente”.
Lula lidera con el 39%, seguido de Tracisio de Freitas con 36%,el actual ministro de Hacienda, Fernando Haddad con 32% y Eduardo Bolsonaro con 27%.
Entre el electorado de derecha, el tercer hijo de Bolsonaro recibe un 56% de apoyo, pero la adhesión cae a 20% entre los votantes de centro, que buscan a alguien más conciliador, precisamente el perfil que buscaría afianzar de ahora en más el eventual candidato bolsonarista.
Lula acusa de “terrorismo” a Eduardo Bolsonaro
En tanto, el presidente Lula ya lo puso en su mira. Sin ambigüedades, calificó de “terrorismo” las gestiones que Eduardo Bolsonaro hizo en Estados Unidos para que el gobierno de Donald Trump sancione a magistrados de la Corte Suprema de Brasil.
“Es inadmisible que el presidente de cualquier país del mundo opine sobre una decisión de la Corte Suprema de otro país”, dijo Lula.
El presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva (Foto: REUTERS/Adriano Machado)
El presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva (Foto: REUTERS/Adriano Machado)
El tercer hijo de Bolsonaro sugirió recientemente que su gestión ayudó a que el secretario de Estado Marco Rubio anunciara la suspensión de visados a funcionarios extranjeros que “censuren” a ciudadanos estadounidenses en las redes sociales.
El temor de Lula es que la medida alcance al juez Alexandre de Moraes, que lleva adelante el juicio por golpismo contra Bolsonaro y que llegó a bloquear temporalmente a la red X y otras plataformas de internet por incurrir en “desinformación”.
“Es lamentable que un diputado brasileño, hijo de un expresidente, esté en Estados Unidos y convoque a ese país para meterse en la política interna de Brasil. Eso es grave, es una práctica terrorista y antipatriótica”, apuntó.
Eduardo Bolsonaro contraatacó: “Todo es un juego de cartas marcadas para dejarme fuera de las elecciones de 2026″.
