Escándalo en el US Open: Medvedev furioso por la irrupción de un fotógrafo y eliminación ante Bonzi

11:45 | Lunes 25 de Agosto de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma

El US Open vivió una jornada caótica durante el enfrentamiento entre Daniil Medvedev y Benjamin Bonzi, correspondiente a la primera ronda del torneo. El episodio que desató el escándalo ocurrió cuando Bonzi se disponía a ejecutar un punto de partido: un fotógrafo ingresó prematuramente al campo de juego, creyendo que el encuentro había finalizado. Esta interrupción obligó al juez de silla, Greg Allensworth, a ordenar la repetición del primer saque, lo que provocó una airada reacción del tenista ruso.

Medvedev, campeón del US Open en 2021 y actual número 13 del ranking ATP, se mostró visiblemente alterado. Cuestionó al árbitro con frases como “¿Eres un hombre? ¿Por qué estás temblando?”, y lo acusó de querer finalizar el partido rápidamente. Incluso evocó declaraciones previas del tenista Reilly Opelka, quien había calificado a Allensworth como “el peor juez de silla de la ATP”.

La tensión se trasladó a las tribunas, que respondieron con abucheos y cánticos, generando una interrupción de más de cinco minutos. Bonzi perdió su punto de partido y el juego, y posteriormente también el set en el tie-break. Medvedev, en sintonía con el público, logró igualar el marcador tras adjudicarse el cuarto set por 6-0.

Sin embargo, el francés logró recomponerse en el quinto parcial, recuperando un quiebre y cerrando el partido por 6-3, 7-5, 6(5)-7, 0-6 y 6-4, en un duelo que se extendió por 3 horas y 45 minutos. Tras la derrota, Medvedev destrozó su raqueta en el banco, visiblemente frustrado.

Bonzi, por su parte, reconoció en sus declaraciones que nunca había vivido una situación similar: “Fue muy difícil jugar con tanto ruido. Intenté mantenerme tranquilo y dejar todo en la cancha”. Medvedev, en conferencia de prensa, anticipó que podría recibir una sanción económica por su conducta, aunque calificó el episodio como “divertido” por la reacción espontánea del público.

El fotógrafo responsable fue expulsado del estadio y se le retiraron las credenciales de prensa, según informó el medio The Athletic. El incidente dejó en evidencia la fragilidad del protocolo en momentos decisivos y abrió un debate sobre el rol de los oficiales en situaciones de alta tensión.