La gloria o Devoto

“Esta campaña electoral será una de las más sucias de las que se tenga memoria”, le dijeron a Eduardo Duhalde los sociólogos que lo asesoran desde hace muchos años.

¿Por qué?

Es una elección a “todo o nada”. “El que gana tiene el poder , el que pierde, la cárcel”, precisaron. Encaja perfecto con la antigua frase criolla que proclama “la gloria o Devoto”. No hay término medio para los analistas. Además, habrá deseos de venganza.

Esta semana, el diario Ámbito Financiero adelantó que los diputados cristinistas piden otra vez el regreso a la cámara del desaforado Julio De Vido. Los mismos que lo expulsaron  quieren que vuelva. Todos juntos triunfaremos, parecen decir.

Eduardo Duhalde insiste: “Ella no puede ganar en la segunda vuelta”. Y anticipa que la irá a visitar en los próximos días. Tiene que agradecerle que ella se preocupo por su salud cuando el ex gobernador fue operado. “Hay que conversar y sugerirle un renunciamiento histórico como el que hizo Eva Perón el 31 de agosto de 1951”, sostienen cerca de Duhalde. “Alli pasó a la historia”, recuerdan.

La pregunta clave es qué pedirá a cambio. En el búnker de Duhalde se preparan  a ver un “pliego de condiciones”. “El problema es si lo podemos cumplir”, adelanta Ramón Puerta. 

Alberto Fernández se encargó de comentar algunas frases de Cristina. El que quiera entender que entienda.

Uno: “A mi me tienen que tratar con el respeto de alguien que fue dos veces  presidente”. ¿Qué significa?. ¿Tiene algo que ver con Comodoro Py?
Dos: “ Que Lavagna me venga a ver”. Duhalde le advirtió: “Nunca va a ir , olvídate”.
Tres: ¿Que van a hacer con los juicios? “Argentina necesita una amplia amnistía para todos”, se escucha decir cerca de ella.
Cuatro: “Mi familia es sagrada”.

Ahora, el dilema es: ¿Quién puede prometer que algunos de estos puntos se van a cumplir? ¿Qué van a hacer con Comodoro Py?

Respuesta: Con el cambio de gobierno, los jueces van a entender que cambio el animo, expresa la expresidenta. Difícil: El cristinismo quiere al fiscal Stornelli y al juez Claudio Bonadio presos.
¿Puede volver el populismo de izquierda?

Con figuras muy extremas como Cristina es muy difícil. Mucho más cuando Venezuela sigue  en la tapa de los diarios. ¿Quién sería el símbolo vivo de una voluntad popular única? ¿Quién va a liderar la lucha contra los enemigos de la patria y del pueblo? La realidad de Venezuela es incómoda.

Pasemos a la economía. Nadie quiere hacer pronósticos en público, mientras en privado señalan que en abril se verán algunas reacciones. El gobierno apuesta a que paritarias, aumento a jubilados  y la Asignación Universal por Hijo empujen el consumo.

En medio del pantano de la recesión se utiliza la posibilidad de mejorar los ingresos para dinamizar a sectores de la economía por el lado de la demanda. Por el otro lado, tenemos todavía aumentos de tarifas en el horizonte.

Febrero: 26 % la luz; 10 % colectivos.
Marzo: 14 % luz ; 9 % colectivos.
Abril: 30 % el gas.
Mayo: 4 % la luz y 27 % el agua.

El impacto en el bolsillo es contundente. ¿Pueden postergar aumentos hasta después de las elecciones? Allí, las posiciones están divididas. Desde Hacienda son muy claros: lo que se debe mantener es el déficit 0. Cristina dos veces en el Congreso explicó que que la deuda es impagable.
Duhalde reflexiona .

“Lavagna aporta votos que no estaban antes en las ofertas peronistas. Atrae votos, muchos de jubilados que antes compró Macri”. El slogan será: “Salgamos”. Algo distante a Macri y Cristina.
Mientras los talibanes de uno y otro lado afilan los dientes, se arman operaciones y carpetazos, la inflación demuestra que ninguna grieta la puede derrotar. Es la mayor sobreviviente de una Argentina en crisis crónica.