En diálogo con la multiplataforma, el analista de política internacional Diego Gutiérrez explicó el trasfondo geopolítico del nuevo entendimiento entre Argentina y EE UU y analizó cómo puede impactar en la relación con los países de la región.
10:03 | Viernes 14 de Noviembre de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
El especialista señaló que lo firmado no es un acuerdo cerrado sino un marco para futuras negociaciones comerciales, similar a los textos suscriptos por Estados Unidos con Guatemala, Ecuador y El Salvador. Explicó que se trata de una jugada en el tablero de la competencia entre Estados Unidos y China, un enfrentamiento comercial que empezó en 2018 y que continúa con diferentes estrategias según el gobierno norteamericano.
En el inicio del desarrollo, Gutiérrez destacó que el caso argentino es particular porque el país integra el Mercosur y debe respetar su arancel externo común. Aun así, el acuerdo entra dentro de un margen de excepciones permitido, aunque remarcó que sería la primera vez que Argentina avanza en un entendimiento comercial por fuera del bloque. Esto, dijo, puede reavivar tensiones dentro del Mercosur, que atraviesa una etapa de crisis y bajo nivel de comercio intrarregional.
El analista agregó que, pese a esas posibles fricciones, al resto de los países les conviene que Argentina siga dentro del bloque por su peso demográfico y comercial. También señaló que algunos socios, como Uruguay y Paraguay, ya venían presionando para tener más libertad para negociar por su cuenta.
Gutiérrez profundizó además en el capítulo laboral del acuerdo, que incluye la adhesión a la ley estadounidense que limita la compra de productos sospechados de estar vinculados al trabajo forzado de la etnia uigur en China. Dijo que eso podría afectar una porción de las importaciones argentinas desde ese país asiático y que forma parte de la intención de Estados Unidos de desacoplar parcialmente a la Argentina del vínculo comercial chino.
Sobre la relación bilateral con China, consideró que este gobierno atraviesa el punto más bajo de las últimas décadas, sin reuniones de alto nivel ni avances en acuerdos recientes. Aun así, sostuvo que Argentina no dejará de relacionarse con China y que el escenario podría cambiar según la evolución política y económica local.
Gutiérrez cerró señalando que el acuerdo con Estados Unidos abre un escenario nuevo en lo geopolítico, con oportunidades y riesgos, y que los próximos meses serán clave para ver cómo repercute dentro del Mercosur y en la relación con las grandes potencias.