En este caso, la reunión tuvo lugar el pasado martes 9 de agosto con ejecutivos de la Federación de la Industria Molinera (FAIM) que preside Diego Cifarelli, a quien Tombolini le aseguró que continuará con la política oficial, más allá de que también hará un seguimiento para conocer el verdadero efecto que tiene en el precio del producto derivado de la harina.
Alimenticias piden aumentos por encima del 3% para los productos de Precios Cuidados
De igual manera, Tombolini escuchó, en otro encuentro, las propuestas de las cámaras empresarias que agrupan a los grandes supermercados.
En este sector, el enojo es con los productores a los que acusan de ser los responsables de los faltantes en las góndolas por privilegiar las entregas a los almacenes de barrio o supermercados de cercanía, donde no está presente el programa oficial y, por lo tanto, pueden vender a mayores precios.
De hecho, desde las grandes cadenas quieren que el flamante secretario de Comercio se comprometa a que reciban los productos al precio acordado y sin limitaciones en las cantidades, según aseguran representantes de las cámaras del Interior CAS y FASA y de los grandes híper nucleados en la Asociación de Supermercados Unidos (ASU).
En todos los encuentros fue brindando datos sobre el nuevo esquema “modo Tombolini” con el que pretende continuar con Precios Cuidados para que vuelva a marcar valores de referencia para los consumidores y para que los fabricantes puedan obtener a la vez algún cierto nivel de rentabilidad.
A tales fines, se espera que el principal encuentro que se agende para los próximos días sea con representantes de la Coordinadora de Productores de Alimentos (Copal), que representa a más de 2.200 empresas de todo el país.
¿Qué pasará con el programa "Precios Cuidados"?
Desde el sector empresario existe malestar y preocupación por el futuro del programa a partir de los datos de inflación de julio, que arrojó un índice del 7,4% y un acumulado mayor al 64% en lo que va del año.
Empresarios del sector advirtieron sobre “los padecimientos” que están atravesando por los constantes aumentos de costos; los cepos a los precios de sus productos y las restricciones a las importaciones.
Recuerdan que el programa oficial solamente permite adecuaciones de precios trimestrales que hasta ahora no superan un promedio del 4% para cada período. Advierten que se trata de incrementos que se encuentran cada vez más alejados del verdadero aumento de los precios que informa mensualmente el Indec y que, por lo tanto, se les hace cada vez más difícil poder cumplir con lo pactado con el Gobierno.
Desde el sector empresario existe malestar y preocupación por el futuro del programa a partir de los datos de inflación de julio
Pecios cuidados: una lista de 1.000 productos
En la actualidad, Precios Cuidados está compuesto por una lista de 1.000 productos y su vigencia rige hasta los primeros días de octubre, ya que se trata de un programa trimestral con renovaciones automáticas y aumentos de precios que establece el Gobierno y que habitualmente se encuentran por debajo de los índices de inflación.
A esta lista hay que sumarle 120 productos lácteos que se deben incorporar al programa por una medida tomada por el anterior Secretario de Comercio Interior, Martín Pollera, quien no llegó a cumplir un mes en su cargo desde que fue designado por Silvina Batakis cuando estuvo al frente del Palacio de Hacienda.
“Quiero que los consumidores recuperen la capacidad de planificar”, dijo Tombolini para quien también será “central” el diagnóstico que le lleven las empresas del sector durante los encuentros ya pactados.
Como señal al sector privado, aseguró que dejará de lado la política de sanciones que venían utilizando los anteriores funcionarios que estuvieron a cargo del organismo.
Su idea es cambiar la lógica del control por la de la verificación, para evitar las persecuciones punitivas y reemplazarlas por un canal de diálogo para verificar el cumplimiento de los acuerdos voluntarios y establecer precios de referencia que le permitan a los consumidores un horizonte más claro a la hora de hacer las compras.
Para lograrlo, lanzarán un servicio para que los clientes que descubran faltantes en góndolas de los productos de Precios Cuidados tengan un modo de indicar la falta de stock. Otra pata de su plan se basa en el control sobre las importaciones, estableciendo mecanismos de verificación de los productos alimenticios que ingresan del exterior y sus valores.
Habrá un permanente contacto con el Banco Central, la Aduana y la Secretaria de Industria para analizar el destino de los dólares, que se respeten los precios y evitar la especulación y el stockeo.