El Papa llegó a Papúa Nueva Guinea, el país de las 800 lenguas y la “brujería”: encuentro con misioneros argentinos

El Papa llegó e la tarde de este viernes a Puerto Moresby, a las 19:10 hora local, capital de Papúa Nueva Guinea tras un vuelo de seis horas desde Yakarta, la capital de Indonesia que visitó durante los tres días de su exitosa primera etapa por cuatro países de asiáticos. Francisco permanecerá hasta el lunes en este país con el mayor número de idiomas del mundo, más de 800 lenguas que hablan sus 10,5 millones de habitantes.

El domingo 8 por la tarde viajará en avión a Vinamo, una pequeña ciudad en el norte a mil kilómetros de la capital, donde se encontrará también con un núcleo de misioneros argentinos.

El sacerdote argentino Martín Prado le presentará un concierto de niños.

El Papa trajo su solidaridad y vecindad a uno de los países más pobres del mundo, castigado por la pobreza y los cambios climáticos cada vez más desastrosos.

La actividad comenzará el sábado con la agenda oficial, que prevé encuentros con obispos y sacerdotes del país y con niños acogidos por un colegio secundario de la Caritas.

También el sábado el papa se reunirá en el santuario de María Auxiliadora con los obispos de Papúa Nueva Guinea y de las islas Salomon. Habrá delegaciones de sacerdotes, diáconos, consagrados, seminaristas y catequistas. El Papa les dirigirá un discurso.

El domingo 8 el Papa recibirá al Primer Ministro Hon James Marape en la Nunciatura Apostólica en la capital y después presidirála la santa misa en el estadio “Sir John Guise” de Puerto Moresby en que pronunciará la homilia y leera la oración mariana del Angelus.

Argentinos en una remota región

Por la tarde, a las 13 hora local, el Papa viajará a Vinamo en avión (mil kilómetros al norte) para seguir la actividad misionera que incluye a varios sacerdotes argentinos. Después regresará a la capital Puerto Moresby.

La población en Papúa Nueva Guinea es de mayoría tribal, que practica también tradiciones paganas e indígenas. Durante siglos se han registrado conflictos tribales por la posesión de las tierras, que se han intensificado en las últimas décadas.

En el país la Iglesia gestiona tres mil de las ocho mil escuelas existentes, en su mayor parte a cargo de sacerdotes, monjas y grupos misioneros que forman parte de una estructura eclesiástica de 19 diócesis y cuatro arquidiosesis.

El obispo Sylvester Warwakai, superior de los misioneros del Sagrado Corazón, dijo que en Papúa deben afrontar las barreras “de la brujería y la hechicería , creencias infernales que existían en un mundo espiritual anterior a la fe cristiana”.

Los cristianos luchan para que el Mensaje del Evangelio atraviese esas barreras, “especialmente las del perdón y las de la compasión”.

El obispo Warwakai dijo que es necesario que la Iglesia también desafíe los valores del patriarcado para fomentar “el respeto por la humanidad” en el país, donde la violencia de género “lo convierte en uno de los lugares más peligrosos para las niñas, los adolescentes y mujeres”, según destaca la agencia española EFE.

En Papúa hay una mayoría abrumadora del 95% de cristianos, de los cuales los católicos representan el 32%.La mayor parte siguen varias religiones protestantes.

Esta antigua colonia australiana fue visitada por Juan Pablo II en 1984 y 1995. Las violencias tribales con 800 lenguas autóctonas hacen más difícil la convivencia. En enero, una manifestación antigubernamental contra contra una rebaja de los salarios causaron varios muertos en los disturbios.

Los conflictos tribales por tierras se han hecho más mortíferos en las últimas décadas

Está previsto que miles de católcos formarán un corredor de velas por las calles de la capital durante la estadía de Francisco en la capital, vestidos con camisetas amarillas con la foto del Papa en el pecho.

Decenas de miles de jóvenes católicos se congregarán en un estadio para reunirse con el Papa en Puerto Moreresby en la mañana del lunes 9.

El Papa partirá después con destino a Timor Oriental, el tercer país de su gira. A Singapur, la última etapa del largo viaje, el pontífice llegará el miércoles 11 y el viernes 13 partirá de regreso en el avión que llegará a Roma a las 18:25, recuperando cinco horas de fuso horario. Serán las 13:25 en Argentina.