Tras darse a conocer una fuerte pelea que lo separó de sus hijos, Piñón Fijo contó que se limaron las asperezas y todo se resolvió.
18:42 | Sábado 02 de Agosto de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
Luego de una etapa cargada de tensiones, distancias y especulaciones mediáticas, Piñón Fijo eligió romper el silencio desde un lugar íntimo y sincero. El querido payaso cordobés habló sobre el proceso de reconciliación con sus hijos, Sol y Jeremías, luego del conflicto familiar que años atrás los puso en el centro de la escena pública.
“Como en toda familia, siempre hay algún berrinche o algún reto”, comenzó relatando con la sabiduría que dan los años y el afecto. “Y una familia que trabaja a la par, como nos ha pasado a nosotros de pasar de estar en un motorhome recorriendo la Argentina de pe a pa y compartiendo oficio, algún roce o alguna rispidez puede haber y se dio lo que se da en todas las familias”, explicó Piñón, rememorando los años de trabajo compartido con sus hijos.
Piñón Fijo habló sobre la relación con sus hijos.
Piñón Fijo habló sobre la relación con sus hijos.
@pinonfijo
Sin embargo, no esquivó el tema de la exposición mediática que, según él, potenció el conflicto: “Lo que no se da en todas las familias es la exposición mediática que no la supimos manejar. Y creo que aprendimos porque al tiempito nomás, nos abrazamos”. Y añadió: “Recuperamos esa mirada inicial de cuando Sol nació y todavía seguimos abrazados”.
Con humildad y sin dramatismos, Piñón reconoció el valor de la intimidad y lo que dejó como enseñanza el doloroso episodio familiar: “Con Jere, Sol, Luna y León aprendimos la lección: somos una familia que tiene cosas de todas las familias, pero que a la hora de entregarle a los otros información deja de ser patrimonio de uno, se va de las manos y termina siendo fruto de una cantidad de especulaciones, de miserias”.
El show que daba Piñón Fijo con sus hijos.
El show que daba Piñón Fijo con sus hijos.
@pinonfijo
En ese mismo tono, el payaso más famoso del país reveló uno de los momentos más profundos de la reconciliación: “Cosas que se dan cuando uno se expone demasiado. Esa lección la aprendimos tanto que el día que nos abrazamos dijimos ‘este abrazo es para nosotros y de nadie más’”. Un gesto simple pero lleno de simbolismo, que marcó un nuevo capítulo en su historia familiar.
“Cuando me preguntan, puedo decir orgulloso que estoy bien, que está cicatrizada la cosa”, confesó con alivio. Un testimonio que, lejos de lo mediático, rescata lo más genuino: el amor familiar que, a pesar de todo, supo reencontrarse.