Las sirenas sonaron en casi toda Israel, salvo en Haifa, para prevenir la ofensiva. Los bomberos trabajan para rescatar a las personas bajo los escombros.
08:28 | Domingo 22 de Junio de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
Una nueva escalada de la tensión en Medio Oriente sacudió a Israel esta madrugada, luego de que Irán lanzara dos oleadas de misiles contra su territorio. Los ataques, que dejaron al menos 16 heridos y daños en edificios, se produjeron horas después de que Estados Unidos bombardeara tres instalaciones nucleares clave de la República Islámica.
Los impactos de los misiles iraníes se reportaron en importantes centros urbanos israelíes, incluyendo Tel Aviv, Ness Ziona y Haifa. En esta última ciudad portuaria, la situación generó particular preocupación, ya que las alarmas no sonaron para alertar a la población sobre la inminente ofensiva.
El servicio de emergencias israelí, Magen David Adom, confirmó el traslado de 16 personas a hospitales, entre ellas un hombre de 30 años con heridas moderadas por esquirlas, mientras que la policía informó sobre la caída de fragmentos de armas en el norte del país, incluyendo la zona de Haifa.
Un residente israelí inspecciona su sala de estar dañada tras un ataque con misiles iraníes contra un complejo residencial en Tel Aviv, Israel.
Un residente israelí inspecciona su sala de estar dañada tras un ataque con misiles iraníes contra un complejo residencial en Tel Aviv, Israel.
EFE
Los nuevos ataques de Irán a Israel
Las sirenas de alerta sonaron en todo Israel ante la magnitud del ataque, mientras el ejército monitoreaba los misiles iraníes dirigidos hacia el país. Equipos de bomberos se movilizaron rápidamente, trabajando en el centro y en el área de Tel Aviv para "localizar y rescatar a personas atrapadas bajo los escombros", lo que da cuenta de la severidad de los daños en algunas estructuras.
La ofensiva iraní se presenta como una respuesta directa a la incursión militar estadounidense. Horas antes, Washington se había sumado a la ofensiva israelí bombardeando tres de las principales instalaciones del programa nuclear iraní. Tras estos ataques, el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Abbás Araqchi, había emitido una contundente advertencia, afirmando que Irán se reserva "todas las opciones para defender su soberanía" y que estas acciones acarrearían "consecuencias duraderas". La situación actual subraya el peligroso punto de inflexión en las relaciones entre estas potencias, con repercusiones inciertas para la estabilidad global
