Mauro Icardi logró llevarse a sus hijas tras 10 horas de estar atrincherado en la casa de Wanda Nara

La disputa entre Wanda Nara y Mauro Icardi alcanzó un punto crítico tras diez horas de discusiones acaloradas, intervención policial y escenas emotivas con sus hijas como testigos involuntarias. Pese a que la abogada Ana Rosenfeld, cercana a la empresaria, aseguró que las menores estaban listas para reencontrarse con su padre, el clima no mejoró.

De acuerdo con Rosenfeld, todo había sido coordinado previamente: “Acá hay una gran confusión. Ayer Wanda preparó a las nenas para avisarles que hoy iban a estar con el papá. Estuvimos hablando hasta tarde. Las nenas sabían esto”, explicó. Sin embargo, la situación escaló hasta requerir la presencia de fuerzas de seguridad.

Mauro Icardi y sus abogadas consiguieron que Wanda Nara entregue a las menores

Finalmente, tras largas horas de negociación, Wanda Nara entregó voluntariamente a las menores, los medios apostados en el ingreso del domicilio de la mediática pudieron ver como llegaron tres ambulancias, según especularon los periodistas, serían para atender una crisis de nervios de la conductora de Telefe.

Mauro Icardi logró salir con sus hijas a bordo de su vehículo, a toda velocidad, la situación no escaló a un episodio de violencia como se temía. Luis Ventura dijo en A la tarde (América TV) que podría haber intervenido el grupo GEOF para ingresar por la fuerza al domicilio

Escándalo total en la puerta de la casa de Wanda Nara: policías, SAME, ambulancias y una ola de periodistas

Un punto clave del conflicto fue el pedido explícito de las menores. Según Rosenfeld, Francesca e Isabella solicitaron, tanto a su madre como a la representante del Ministerio Público Tutelar, la Dra. Matera, que no hubiera terceros presentes: “Le pidieron por favor a Wanda y a la persona del Ministerio Público Tutelar, que es la doctora Matera, con su lenguaje, con su idioma y en la forma que se pusieron expresar, ‘por favor, queremos que nos asegures que no van a estar otras personas’”.

Así se retiraba a toda velocidad Mauro Icardi con sus dos hijas en su vehículo

Mientras el operativo continuaba y los ánimos seguían caldeados, el desgaste emocional de las hijas quedó en evidencia. La abogada insistió en que el deseo de las pequeñas era claro, pero la falta de acuerdo entre los adultos terminó por opacar lo que debería haber sido un momento de reconciliación familiar.