Angelina Jolie y Brad Pitt: una nueva batalla judicial por el viñedo Château Miraval

09:28 | Jueves 03 de Julio de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma

Angelina Jolie y Brad Pitt, dos de las figuras más reconocidas de Hollywood, protagonizan un nuevo capítulo en su prolongado conflicto legal. Aunque su divorcio fue formalizado recientemente tras ocho años de disputas, la ex pareja se encuentra nuevamente en el centro de una controversia judicial, esta vez por la propiedad del viñedo Château Miraval, ubicado en el sur de Francia.

La finca, adquirida en 2008 durante su matrimonio, no solo fue escenario de su boda, sino también una inversión millonaria que ambos compartieron. Actualmente, el desacuerdo radica en la venta de la participación de Jolie en la bodega sin el consentimiento de Pitt, quien alega que existía un pacto verbal que impedía cualquier transacción sin la aprobación mutua.

Según trascendió, Brad Pitt inició acciones legales en 2022, acusando a su ex esposa de violar dicho acuerdo al vender su parte a una empresa vinculada al magnate ruso Yuri Shefler. Jolie, por su parte, sostiene que no existía ningún compromiso formal que limitara su derecho a disponer de su participación en la propiedad.

El conflicto se ha intensificado debido a la complejidad del caso, que involucra entidades extranjeras, múltiples demandas cruzadas y una inversión significativa. La disputa no solo afecta el control operativo del viñedo, sino también la imagen pública de ambos actores, quienes han evitado en gran medida exponer detalles de sus diferencias ante los medios.

En este contexto, los abogados de ambas partes trabajan contrarreloj para alcanzar una resolución, aunque todo indica que el proceso judicial podría extenderse por varias semanas. La situación refleja la dificultad de disolver vínculos patrimoniales en relaciones de alto perfil, donde los intereses económicos y personales se entrelazan de manera profunda.

Este nuevo enfrentamiento entre Jolie y Pitt pone de manifiesto que, a pesar de haber concluido su vínculo matrimonial, las tensiones entre ellos están lejos de resolverse. El caso del Château Miraval se convierte así en un símbolo de las complejidades que pueden surgir cuando el amor, los negocios y la fama se entrecruzan.