El expresidente Mauricio Macri y el actual mandamás de Boca, Juan Román Riquelme, coincidieron en el Congreso de la FIFA en Paraguay. Miradas cruzadas, distancia y una frase que lo dice todo.
16:44 | Jueves 15 de Mayo de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma
El Congreso número 75 de la FIFA, en Paraguay, dejó una postal más política que futbolera: Mauricio Macri y Juan Román Riquelme, enfrentados desde hace años, compartieron el mismo espacio. El expresidente de la Nación, actual titular de la Fundación FIFA, caminó bajo el sol hacia el centro de convenciones de la Conmebol sin saber si se cruzaría con Román. O tal vez sí. Porque dejó picando una frase según reflejó el diario Olé: “Ojalá que no me lo cruce”.
Del otro lado, Riquelme también dijo presente, se sentó junto a Nery Pumpido y fue buscado por dirigentes y fanáticos que lo saludaron y le pidieron fotos. Incluso Victor Montagliani, presidente de la Concacaf, se sacó una con él. Pero el momento incómodo llegó cuando Macri, ya en el escenario, tomó la palabra. Román, a metros, lo escuchó en silencio. Ni una sonrisa, ni un aplauso. Solo tensión.
En su discurso, Mauricio Macri hizo hincapié en el programa comunitario en el que la FIFA llegó a más de cien mil niños y jóvenes. Foto: captura de TV.
La relación entre ambos está rota desde los tiempos en que Macri era presidente de Boca y Riquelme la gran figura del equipo. Hoy, el fuego cruzado sigue: el exmandatario es uno de los principales críticos de la gestión actual, mientras desde el oficialismo acusan al macrismo de operar para desestabilizar.
El evento también contó con otros protagonistas de peso, como Claudio “Chiqui” Tapia y Alejandro Domínguez. Pero todos los ojos estaban puestos en esa vieja rivalidad que volvió a quedar expuesta, sin necesidad de palabras, pero con gestos que dijeron todo.
El mensaje de Riquelme a los hinchas de Boca
Este miércoles, desde Asunción, adonde viajó junto al secretario general Ricardo Rosica y a Raúl Cascini, Riquelme se sumó al Torneo de Leyendas, un certamen amistoso en el que participaron representantes de distintas confederaciones como Chiqui Tapia y Alejandro Domínguez, miembros de la FIFA y hasta funcionarios políticos. Un encuentro informal, pero con mucho peso dirigencial.
Después de uno de los partidos, Juan Román Riquelme habló brevemente con la prensa sobre la participación de Boca en el próximo Mundial de Clubes en Estados Unidos. Le pidieron un mensaje para los hinchas y respondió con claridad: “Los quiero mucho, que disfruten. Vamos a estar bien, que no se dejen llenar la cabeza. Nada más”. Un dardo sutil pero directo, en medio del clima caliente que se vive en Brandsen 805.