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Descubrimiento arqueológico en Aconcagua: nuevo vestigio de presencia incaica en Mendoza

Un muro de piedra de 45 metros fue hallado a más de 4.300 metros de altura en el cerro Aconcagua. El hallazgo refuerza la hipótesis de que el Imperio Inca extendió su influencia hasta el actual territorio mendocino.

Miércoles 27 de Agosto de 2025

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10:40 | Miércoles 27 de Agosto de 2025 | La Rioja, Argentina | Fenix Multiplataforma

Un reciente hallazgo arqueológico en las laderas del cerro Aconcagua ha revelado nuevas evidencias de la presencia del Imperio Inca en territorio argentino. Se trata de una estructura de piedra de aproximadamente 45 metros de largo y 70 centímetros de alto, ubicada a 4.350 metros sobre el nivel del mar, en una zona de difícil acceso incluso para los andinistas más experimentados.

La formación, compuesta por pircas —muros construidos con piedras encajadas y argamasa—, fue descubierta por el investigador y artista Miguel Doura, quien desde hace más de dos décadas reside en lo alto del Aconcagua y colabora con equipos científicos. El sitio se encuentra en el Valle Sagrado de Los Horcones, entre el campamento base Plaza de Mulas y un antiguo hotel cerrado en 2013.

Los especialistas del Programa Qhapaq Ñan y del Museo de Arqueología de Alta Montaña, liderados por el arqueólogo Christian Vitry, estudian actualmente la función de esta estructura. Se barajan hipótesis que van desde un uso ceremonial vinculado al culto solar —por su orientación hacia los solsticios— hasta su posible empleo como refugio para agricultores y sus llamas durante travesías por la cordillera.

Este descubrimiento se suma a otros indicios previos de presencia incaica en la región, como el hallazgo en 1985 del cuerpo de un niño sacrificado bajo el ritual de capacocha en la cima del Aconcagua, a 5.300 metros de altura. También se han registrado ofrendas en forma de estatuillas en la zona de Puente del Inca.

La ubicación del muro, alejada de los tradicionales senderos del Camino del Inca, sugiere que el Imperio pudo haber desarrollado rutas alternativas para fines religiosos, agrícolas o comerciales. Este nuevo vestigio podría contribuir significativamente a completar el mapa de expansión incaica en el Cono Sur y a comprender mejor las prácticas culturales de los pueblos prehispánicos andinos.

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